Algo se cuece en la cocina

Desde hace unos días podemos ver en los no-anuncios de TVE la promo de los castings de MasterChef. Parece que por fin en España nos hemos dejado conquistar por este formato de éxito internacional que ya se emite en más de 30 países.

Aunque cueste creerlo no proviene de la generación de realities de los últimos tiempos. MasterChef nació hace 22 años en la BBC inglesa. Y hasta hoy.

El reality pretende encontrar al mejor cocinero a través de una serie de programas, con su jurado y sus eliminatorias. Vamos, como los realities de cantantes, pero con cocineros.

Vista la larga trayectoria de este formato, y la buena acogida que ha tenido en todos los paises a los que se ha exportado, era extraño que todavía no hubiese desembarcado en nuestro país. Aunque por otra parte se entiede. En Inglaterra, los pobres, que comen sandwiches y su comida más famosa es el pescado con patatas, pues es normal que no le tengan mucho respeto a la cocina. Pero aquí en España es distinto, que nuestra gastronomía es uno de nuestros bienes más preciados, y en todas las familias hay un cocinillas.
 

 

Probablemente, el espaldarazo definitivo para que Masterhef vea la luz en España, haya sido el inesperado éxito de Pesadilla en la cocina, en La Sexta. Al frente de esta versión está Alberto Chicote, que ha intentado meter en vereda a los díscolos dueños de terribles restaurantes en la ruina, y con razón. Nada nuevo, por otra parte, porque en Neox, llevábamos viendo desde hace unos años, la versión inglesa y americana, Kitchen Nightmares, que conducía el histérico de Gordon Ramsay. Es su personalidad la que le daba emoción al formato, y desde luego, la que han copiado para adaptarlo a España. Tampoco vamos a ser injustos, que Chicote también tiene su gracia y es verdad que se agradece ver un restaurante de los de toda la vida, que podrían estar en cualquier ciudad, y no los inumerables restaurantes italianos cutres que ha ido a salvar Ramsay del fracaso. En Estados Unidos, ya se que no tienen mucha historia, pero ¿tampoco tienen gastronomía propia? 

Estamos ya atándonos el mandil y precalentando el horno a la espera del estreno del aclamado MasterChef. A la española, como la tortilla, que está mucho más rica.