miércoles, 1 de febrero de 2012

Como en casa en otro sitio

Seguro que si lo pensáis hay un lugar que echais de menos.
No me refiero a vuestra casa , si estáis lejos de ella o a ese sitio donde tan bien lo pasasteis en verano.
Hablo de sentir que un lugar forma parte de tí.
Yo no sé cómo ha pasado ni cuando comencé a sentirlo, pero desde hace tiempo siento que Italia me pertenece.O que yo pertenezco un poco a ese país mejor dicho.
No es por sus momumentos, su vasta historia, su comida...No, es por su luz, el acento de sus gentes, el ruido de sus coches, su música, el olor a pizza de sus calles. Son cosas que antes de vivirlas sabía que me faltaban y ahora que las he podido vivir, las echo de menos.
Las echo de menos como si fueran parte de mí, como si mantenerme alejada de ellas me hiciera mal.
Este sentimiento tan raro que no entiendo y que me hace sonreír cuando oigo a alguien hablar italiano o que me hace prestar más atención si en las noticias hablan de Italia, es algo que asocio con lo que yo llamo la teoría de las vidas pasadas.
No se cómo he llegado a ella pero he desarrollado una teoría que explica que antes de que nuestra alma o nuestro espíritu entrara en nuestro cuerpo y viviera en nuestras circunstancias, quizás esa alma estuvo viviendo en otro cuerpo, en otro sitio.Mi alma sin duda estuvo en Italia.

Quizás sea solo cuestión de gustos o de afinidades pero yo apuesto a que mucha gente siente lo mismo que yo.Que siente pertenecer a otro lugar en el que alomejor ni si quiera ha estado.
Desde luego yo me siento muy orgullosa de mis raíces y de donde soy , pero la sensación de volver a casa al estar en el extranjero solo la he tenido en Italia. Me es extraño incluso a mí, no lo entiendo, pero cada vez que como pasta al dente me siento más yo, más italiana.

Como ahora no puedo estar allí y la vista no es a veces suficiente, os invito a jugar con otros sentidos.Mientras véis fotos de Italia, yo os aconsejo poner una pizza en el horno para que os llegue su olor, abrir el frasco de orégano y la ventana para sentir el tráfico.Y como compañía escuchar esta canción que trasporta sin quererlo a la Bella Italia.



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